Juan Rodríguez Cabrillo appears before justices in the city of Cadiz on February 12, 1532 to give testimony regarding the theft of His Majesty’s gold aboard a ship that set sail from Veracruz (Mexico). In this sworn testimony Rodríguez Cabrillo states, for the first recorded time, that he is a native of Palma de Micer Gilio (Palma del Río). In answer to the extensive list of questions Cabrillo swears that Gabriel de Cabrera, legal representative of the city of Santiago de Guatemala, handed two crates with His Majesty’s gold to the boatswain Pedro Ochoa for safe keeping. In his testimony Rodríguez Cabrillo describes the first location of the crates on the ship and how they were subsequently moved by the boatswain. Rodríguez Cabrillo also details that while awaiting the departure of the ship he went with Gabriel de Cabrera to get food supplies and that during some of the voyage Cabrera was extremely seasick.
Original in Spanish below._______________________
Archivo General de Indias, Justicia, 1159, N.5. Extracto de un testimonio que dio Juan Rodríguez Cabrillo, natural de Palma de Micer Gilio, delante de los señores jueces en el juicio sobre el oro de Su Majestad. Cádiz, 12 de febrero de 1532, imgs. 92-94.
E luego los dichos señores Juezes mandaron paresçer ante si a un onbre que se dixo por nonbre Juan Rodriguez Cabrillo natural de Palma de Meçigilio e del tomaron y resçibieron juramento en forma de derecho e le fizieron las preguntas siguientes.
Preguntado que si conoce a Graviel [Gabriel] de Cabrera dixo que si por que vinieron desde Guaçacalco hasta la Vera Cruz juntos donde se enbarcaron en una nao. Preguntado que si conoce al piloto e contramaestre e despensero dixo que si desde este viaje.
Preguntado que si vido que el dicho Cabrera traya dos caxones de oro de su magestad dixo que vido que traya dos caxones atado uno con otro que traya oro del Rey [img.93].
Preguntado que de que manera los traya dixo que los traya los dichos caxones enbueltos en lienços de la tierra cosydos e clavados e liados con cordeles de muchas bueltas asido uno con otro en unas esparihuelas e con un cordel conplido atados como una boya para que a caso el barco donde entrasen se hanegase el oro se salvase e desta manera los traya.
Preguntado que si a bisto que desta manera se aya traydo otras vezes oro de su magestado dixo que si destas propia manera se trae e lo a visto traer.
Preguntado que si bido o sabe que el dicho Gabriel de Cabrera enbarcase e metiese en la dicha nao en el puerto de San Juan de Ulua los dichos dos caxones de oro atados e adereçados como dicho tiene e a quien los dio y entrego en la dicha nao dixo que sabe e vido que yiendo el dicho Cabrera en un barco e alli los caxones vino en el batel de la nao Pero Ochoa contramaestre della en el batel e alli enbarco los dichos dos caxones de oro como venian en una caxa de otro pasajero y este testigo y el dicho Cabrera se entraron en el batel e se fueron a la nao y entraron dentro della e alli el dicho Cabrera [img.94] dixo al dicho contramaestre Pero Ochoa que aquellos caxones heran oro de Su Magestad que los pusiese en cobro hasta que el piloto que estaba en la Vera Cruz viniese y el dicho contramaestre dixo a Cabrera se los meteria en su caxa e Cabrera le dixo que antes le haria merced y el dicho contramaestre tomo los dichos dos caxones liados e atados como dicho tiene e los metio en su caxa e asimismo una petaca con escripturas e joyas de oro que el dicho Cabrera traya e despues del contra maestre aver guardado el dicho oro e joyas se fueron a la Veracruz a se proveer de matalotaje este testigo e Cabrera y estuvieron alli en la Veracruz quatro o cinco dias hasta que despues se vinyeron a enbarcar en la dicha nao e despues de enbarcardos estovieron en el puerto otros dos o tres dias antes que partiesen e yendo por la mar desde a otros quatro dias el dicho Pero Ochoa contramaestre saco de su caxa los dichos dos caxones de oro e las puso sobre cubierta al pie del cabestante e le fue a dezir al dicho Cabrera que estaba almadiado de la mar que guardase los dos caxones de oro y el dicho Cabrera le respondio que los tubiese en su caxa como los abia tenido que el no tenia donde ponelles (…)